Pizzería Marquinetti
Pizzería Marquinetti
Comida para 4 en el “TEMPLO DE LAS PIZZAS” de España.
Que la pizza es alta cocina ya no se puede poner en duda una vez que vas a Marquinetti y pruebas las creaciones de Jesús Marquina.
Jesús Marquina es la “CUMBRE” de las pizzas en España, habiendo sido 5 veces campeón del mundo de la especialidad. De ahí, el apodo que le han puesto los italianos: Dottore Marquinetti.
Marquinetti se encuentra en Tomelloso y es imprescindible reservar si no quieres echar el viaje en balde. Hay dos turnos que, quizás, no sean los más deseados, el primero a las 13:15 y el segundo a las 15:15.
La carta se presenta en una tabla de cortar. Por un lado, los vinos y por otro las pizzas, las ensaladas, pastas y demás platos. Aquí, claramente, hay que venir a morir con las pizzas.
Si es la primera visita, en Marquinetti recomiendan pedir la pizza de ‘foie’, la ‘mare e monti’ y la ‘rolling’, así que hicimos caso al personal pero cambiando la de ‘foie’ por la de ‘rabo de toro’ que resultó ser la que menos sorprendió dentro de lo buenas que estaban las tres.
Si andáis perdidos, dejaos asesorar para no pedir mal y sobre todo para no ‘petar’ comiendo pizza.
Obviamente se disfruta más juntándose 4-6 personas y pidiendo varias a compartir. Nosotros pedimos una burrata para abrir boca (probablemente la mejor que hemos comido en nuestra vida) y 3 pizzas medianas para 4.
Los postres son para olvidar. De hecho, merece la pena que hagáis el esfuerzo con una pizza más y no pidáis postre.
La eterna pregunta que nos han preguntado cientos de veces es: ¿MERECE LA PENA EL VIAJE A Marquinetti? Rotundamente SÍ. Viene gente de toda España a comer aquí y no es casualidad. Muchos nos dicen que, por qué cojones nos vamos a Tomelloso a comer pizza, algo así como, ¡estáis locos!, pero lo de las pizzas aquí es otra historia. Merece la pena que os desviéis hasta Tomelloso en algún viaje que hagáis y paséis relativamente cerca. Sólo 25€ por persona tendrán la culpa.
PUNTUACIÓN FINAL: Consensuado entre los 4, Marquinetti es un 10 de manual, pero por los postres y, quizás, por el esfuerzo que hay que hacer para desviarse y comer allí, le damos un 9,5.